Esta mañana hemos ido de excursión con el centro donde recibo clases a Gibraltar.
Básicamente hemos ido a ver a los monos que están en libertad en lo alto del peñón de Gibraltar. Como escuché a unas personas mayores: «manda huevos que lo más característico de aquí sean los monos» (al vernos a nosotros juntos). Técnicamente se llama Macaca Sylvanus o mono de Berbería y son los únicos que están en libertan en toda Europa.
Nos advirtieron de que era peligroso tocarlos porque mordían, también nos alertaron de sostener las mochilas y bolsos delante nuestra y bien agarrados porque son perfectos ladrones (buscan comida).
El rato que estuvimos arriba del peón de Gibraltar en comunión con los monos vimos a muchos de ellos, algunos pequeñitos como el de arriba en la imagen y otros mucho más grandes. Un chaval muy valiente dejó que se le subiera éste de la imagen de arriba y a otra señora mayor le mordió en el brazo otro porque al parecer le puso el brazo muy cerca. El mismo mono que además me persiguió porque llevaba una ensaimada en la mano y tuve que tirársela por miedo a que se abalanzara sobre mí.
Éste sí se hizo con un buen botín, aprovechó el descuido de una extranjera que dejó la bolsa con manzanas, naranjas, plátanos y una bolsa de magdalenas (¿quién lleva plátanos ahí arriba sabiendo que hay monos en libertad?). El mono abrió perfectamente la bolsa, quitando los envoltorios a las magdalenas para comérselas una a una sin compartir ninguna con ningún otro mono.
Y un detalle, o en Gibraltar son unos locos y no respetan nada… o están muy ciegos, fijaos en la magnitud de los semáforos comparadas con las cabezas.
Y tal día como hoy… mi chica y yo nos besamos por primera vez hace dos años ya 🙂 ¡Te quiero!