Si hay tema de conversación que no aguanto es el tiempo. Siempre recurrimos al tiempo y, la verdad, prefiero estar callado a hablar del tiempo, me aburre muchísimo. Si hace calor porque hace calor y cuando viene el frío porque hace ya mucho frío…
Pero el otro tipo de conversación que me repatea es aquél en el que son dos monólogos. Me explico: es aquél tipo de conversación en que te da igual exactamente qué te esté contando la otra persona que sólo pretendéis soltar cada uno vuestro rollo y punto. Ejemplo de conversación:
Persona1: Pues mi niña no me come mucho ahora.
Persona2: Ah no, la mía sí desde siempre.
P1: Qué va, qué va, y mira que le hago cosas ligeritas no muy pesadas.
P2: A mi niña no le tengo que decir nada, ella empieza y se lo come todo, todo.
P1: Acabo por metérselo a la fuerza porque sino no hay manera mujer.
P2: Pues en mi familia de toda la vida hemos sido de comer bien.
P1: Y el padre que me echa la bronca por metérselo a la fuerza y yo: ¿pero chiquillo tú la ves? dáselo tú si eres capaz.
P2: Bla, bla, bla…
Conversaciones como éstas escucho cada dos por tres, con lo fácil que es prestar atención e interesarte por lo que te está contando la otra persona…